18/11/2011 - 18/11/2011
Con él desaparece un valor significativo e importante de la Fotografía y de la Cultura.
Nació en Almería, pero fue artista del mundo por su potencia creadora, su actitud rompedora y visionaria, por el surrealismo con que impregnó su vida cotidiana y profesional. Marcó, desde la dirección de Nueva Lente, los que serían los nuevos tiempos de la imagen. Sorprendió a todos, enseñó a muchos, y se le puede considerar el provocador y el aliciente que tenía que tener la Fotografía española para acometer una contemporaneidad tan necesaria. Considerado "maldito" en algunos círculos culturales por su extremado rigor, el paso de los años nos dio un Jorge Rueda con mucha profesionalidad y oficio, pero igual de rebelde y lúcido. No se
casaba con nadie, pero apoyaba con sus fotos y su discurso los argumentos creativos en beneficio de la fotografía. No podría haber sido de otra manera.
Desde los comienzos del proyecto IMAGINA, desarrollado en su tierra y que dio paso a la creación del Centro Andaluz de la Fotografía, Rueda fue un referente indispensable, junto a otros valores nacionales e internacionales.
De la mano del también fallecido y anterior director del CAF, Manuel Falces, participó en muchas de las apuestas que el Centro se planteó. La última, ya en la nueva etapa y con Pablo Juliá como director, fue en la inauguración de la nueva sede del CAF, con una importante retrospectiva de su obra que llamó Human y que es, posiblemente, la única exposición que existe sobre la generalidad de su obra.
Jorge Rueda ha sido y es muy querido en el CAF, y todos sentimos profundamente su muerte. Y sentimos, también, que no haya podido recibir el Premio Nacional de Fotografía, que merecía sobradamente. En el libro que acompaña a la exposición Human escribía: “sigo teniendo muy presente que las ocultas leyes del azar no están nada dispuestas a que le adivines su intención. Y que todo plazo se acaba cumpliendo.”
Nacido en Almería, España.
Realizó estudios de diseño industrial y energías alternativas.