César Lucas
11/11/2023 - 24/01/2024
Sala L. Museo de Fotografía. Fundación Antonio Pérez Pl. Cristo, 5, 16500 Huete, Cuenca
Viernes y sábados: de 11:00 a 14:00 y de 16:00 a 18:00. Domingos: de 11:00 a 14:00
Fundación Antonio Pérez
Agencia Andaluza de Instituciones Culturales
El Centro Andaluz de la Fotografía viaja a Huete (Cuenca)con la exposición El Oficio de Mirar, de César Lucas, que hace un recorrido por la trayectoria de uno de los fotoperiodistas más importantes en la historia reciente de España. La muestra, comisariada por Vicente Tofiño y Miguel Gómez, reúne alrededor de 120 imágenes en seis capítulos: Orígenes, Cine, Mitos de un país, Nuevos tiempos, Rostros y Recorridos. Está abirta al público desde el 11 de noviembre al 14 de enero de 2024 en la sala L del Museo de Fotografía de la Fundación Antonio Pérez.
César Lucas. Historia del Fotoperiodismo Español
Por Vicente Tofiño, comisario.
Cuando contaba con diez o doce años y se dirigía al Instituto Cardenal Cisneros en la Plaza de España de Madrid, César Lucas tenía varios focos de atención en la Gran Vía: los escaparates de Alfonso –que retrató a poetas como Antonio Machado o Federico García Lorca-, de Vicente Ibáñez –que mostraba imágenes de artistas de cine y famosos-, y de Juan Gyenes, –que exponía los rostros de su clientela aristocrática y con poder-.
Sin querer ya estaba eligiendo su destino, su oficio, al que ha dedicado toda su vida, con una obra ecléctica, marcada por el fotoperiodismo, la moda, los viajes, el reportaje o su pasión actual: las escenas de la vida cotidiana, la España costumbrista del siglo XXI.
César (así firmó su primera fotografía cuando contaba con 16 años y la publicó ABC) comenzó a dar buena muestra de su profesionalidad en sus inicios en el diario Pueblo o en la Agencia Europa Press, para quien realizó, con 18 años, la cobertura de la visita del Che Guevara en 1959. En ese reportaje, obsesionado por lograr el retrato perfecto lo consigue cuando aquel revolucionario de traje militar verde oliva dejaba ver al fondo el Arco del Triunfo, símbolo de la dictadura franquista. Solo se publicó una pequeña foto en Pueblo antes de ser reconocida internacionalmente años después.
En 1965 crea su propia agencia, Cosmo Press, combinando su trabajo en prensa con la realización de encargos como fotógrafo destacado, para las compañías cinematográficas estadounidenses en las superproducciones de las grandes películas que se ruedan en España. Por su cámara pasan estrellas como Katharine Hepburn, Brigitte Bardot, Sean Connery, Raquel Welch, Yul Brinner, Romy Schneider, John Lennon, Billy Wilder, Clint Eastwood, Stephen Boyd o Buster Keaton.
En esta diversificada carrera en torno a la imagen, César Lucas aporta la consolidación en España de la figura del editor gráfico, incorporándose al equipo fundacional de la revista Gentleman en 1973, para pasar al equipo fundacional de El País como primer jefe de fotografía del periódico. En estos tiempos de transición el fotoperiodismo y la imagen se consolidan como elementos informativos con lenguaje propio.
Hay dos fotografías que resumen los momentos del cambio: la foto del niño a hombros de su padre levantando el puñito en una de las primeras grandes manifestaciones en Madrid y el desnudo de Marisol en Interviú, símbolo de la recién llegada libertad de expresión.
Tras el franquismo, la transición, las estrellas de cine y los desnudos, César Lucas se centra en la fotografía de viajes, moda y de retratos en otras publicaciones como Panorama, Novedades o Viajar.
César Lucas ha formado parte del patronato de la Fundación Española de la Fotografía, fue el primer español invitado a formar parte del jurado internacional del concurso World Press Photo, fundador del concurso fotográfico Photo Press de la Fundación La Caixa, y uno de los redactores del «Manifiesto sobre la edición gráfica en la prensa», Pazo de Mariñan, A Coruña. Ha publicado el libro autobiográfico Cesar Lucas de la colección Photobolsillo y la antología de cincuenta años El oficio de mirar, de Ediciones Lumwerg.
Su jubilación, en 2009, no ha supuesto el fin de una carrera y una personalidad que sigue dando la visión de un país y de su cotidianeidad a través de la gente, con su irrenunciable derecho a la libertad de expresión y al trabajo bien realizado que siempre se impuso.